domingo, 13 de marzo de 2016

Del "ciudadano Kane" al candidato Barnechea

Es una verdad elemental señalar que los medios de comunicación social forman la opinión pública, dirigen la toma de conciencia ciudadana y hasta ponen la agenda a los políticos. Así las cosas, el propio Valentín Paniagua Corazao, en su ensayo “Democracia y Política” advierte del riesgo y obstáculo que supone a la democracia representativa el hecho de tener medios de comunicación parcializados y uniformes. Sin embargo, ello no ha sido así siempre.


 De hecho hubo un momento auroral, que podríamos ubicar en los inicios de moderna democracia representativa hacia 1835, cuando Alexis de Tocqueville consagrara en su clásico “La Democracia en América” que: “...La Prensa es por excelencia el instrumento democrático de la Libertad”. Y, ha sido el famoso actor Orson Welles quien inmortalizó en nuestra memoria colectiva la ficción de un hombre que busca ganar las elecciones políticas a la gobernación de Nueva York en contra de los grandes poderes fácticos, sin más respaldo que su opinión y la del medio de comunicación que utiliza para encausar la opinión pública.